Un estudio de la consultora PwC arroja datos que aseguran este es el año donde se comenzará a experimentar realmente con la inteligencia artificial (AI, por sus siglas en inglés), para lo cual se necesita que la automatización de procesos haga su trabajo en muchos ámbitos.
La inteligencia artificial abrirá nuevas fuentes de ingresos para las empresas dedicadas a la impresión, el beneficio es que mejorará la efectividad del proceso de imprimir de extremo a extremo, desde la creación de trabajos hasta la producción continua y la optimización de los servicios de los equipos.
También mejorará todos y cada uno de los aspectos del proceso de impresión, limitada solo por la cantidad de recursos (financieros, tecnológicos, empleados) disponibles para hacer este cambio. Al igual que con la introducción de cualquier tecnología nueva en un negocio, lleva tiempo evaluar qué tiene más sentido para cada negocio.
Se puede elegir, por ejemplo, implementar AI para automatizar tareas que anteriormente eran cuellos de botella en el proceso de impresión, aumentando la producción diaria de la empresa. Alternativamente, se puede decidir descargar parte del trabajo más rutinario a una máquina para permitir que su equipo se concentre en un trabajo más estratégico.
“En Xerox contamos con algoritmos inteligentes que pueden descifrar diferentes diseños de documentos, la optimización de la impresión con el fin de minimizar el desperdicio impreso que impulsan el ahorro de costos y también es benéfico para el medio ambiente”, comentó Israel López, Director de Marketing para Xerox Mexicana.
Del mismo modo, aquellos en el negocio de imprimir correo directo y catálogos están aprovechando los datos que tienen disponibles para personalizar automáticamente el contenido para el destinatario, creando envíos más relevantes. Este es un pequeño cambio, pero uno que puede darle la ventaja sobre la competencia.
“Su punto de partida también podría ser tan simple como instalar un software inteligente que tenga la capacidad de controlar que impresoras están ocupadas y luego enrutar nuevos trabajos a máquinas disponibles en su nombre. Los equipos Xerox emplean sensores para monitorearse constantemente y realizar ajustes en tiempo real en el proceso para la alineación del papel y la calidad de imagen para proporcionar el mejor resultado de impresión posible sin intervención humana”, comentó López.
Desde el punto de vista del mantenimiento, las máquinas también estarán conectadas a sus proveedores, lo que permitirá analizar los datos de la máquina de forma segura, compararlos con el rendimiento esperado y ajustarlos o actualizarlos de forma remota. En el futuro, esta información podría usarse para predecir la necesidad de servicio antes de que la máquina falle.
Por otra parte, con el auge del contenido digital, hay una gran oportunidad para aprovechar los datos en línea y ofrecer servicios de impresión mucho más personalizados en el futuro, como crear álbumes de fotos personalizados mediante la determinación de las imágenes favoritas de los medios sociales o sintetizar catálogos impresos o boletines informativos basados en qué páginas está mirando el comprador.